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Introducción al trastorno de habilidades motoras

Las habilidades motoras son de vital importancia en el desarrollo y funcionamiento de los niños. Estas habilidades los permiten realizar movimientos físicos y participar en actividades cotidianas, educativas y recreativas de manera efectiva. Aspectos como el desarrollo físico, la independencia y autonomía, participación en actividades escolares, interacción social o desarrollo cognitivo.

Fomentar el desarrollo de habilidades motoras en los niños es determinante para su crecimiento y desarrollo integral. Proporcionar oportunidades de juego activo, participación en actividades físicas, práctica de destrezas motoras y apoyo adecuado puede ayudar los niños a mejorar y fortalecer sus habilidades motoras en diferentes etapas de su desarrollo.

El trastorno de habilidades motoras, también conocido como trastorno del desarrollo de la coordinación (TDC) o dispraxia, es una condición que afecta la capacidad de un niño para coordinar y ejecutar movimientos de manera precisa y fluida. Esta dificultad en la coordinación motora no se debe a problemas musculares, sensoriales o intelectuales, sino que es el resultado de un desorden en el procesamiento cerebral de las habilidades motoras.

¿Cuáles son las causas del trastorno habilitados motoras?

Aunque no se conocen las causas exactas del trastorno de habilidades motoras, se cree que hay múltiples factores que pueden contribuir al desarrollo de esta condición. Algunos de los posibles factores causales incluyen:

  • Factores genéticos: Existe evidencia que el trastorno de habilidades motoras puede tener una base genética. Se ha observado que hay una mayor incidencia de esta condición en familias donde otros miembros también presentan dificultades motoras.
  • Problemas en el desarrollo cerebral: Se cree que algunos problemas en el desarrollo del sistema nervioso central pueden estar relacionados con el trastorno de habilidades motoras. Esto podría incluir alteraciones en la maduración y organización de las áreas cerebrales encargadas del control y coordinación de los movimientos.
  • Factores ambientales: Algunos factores ambientales durante el desarrollo prenatal y perinatal pueden estar asociados con el trastorno de habilidades motoras. Estos factores pueden incluir la exposición a toxinas, infecciones durante el embarazo, complicaciones durante el parto o lesiones cerebrales traumáticas.
  • Disfunción sensorial: Algunas teorías sugieren que las dificultades sensoriales, como la integración sensorial alterada, pueden contribuir al trastorno de habilidades motoras. Los problemas para procesar la información sensorial de manera eficiente pueden interferir con la planificación y ejecución de los movimientos.

¿Cuáles son los síntomas del trastorno de habilidades motoras?

Los síntomas del trastorno de habilidades motoras pueden variar de un niño a otra, y la gravedad de los síntomas también puede ser diferente. Estos son algunos síntomas comunes asociados con este trastorno:

  • Coordinación motora deficiente: Pueden tener dificultades para coordinar y controlar los movimientos de su cuerpo.
  • Dificultades en tareas motoras finas: Pueden tener problemas para realizar actividades que requieren movimientos precisos y coordinados de las manos y los dedos, como tener dificultad para abotonarse la ropa, usar cubiertos de manera adecuada, escribir, recortar con tijeras o hacer nudos.
  • Problemas en actividades deportivas y juegos: Pueden tener problemas para atrapar una pelota, lanzarla con precisión, saltar, correr o andar en bicicleta.
  • Bajo rendimiento académico: Puede afectar negativamente el rendimiento académico, especialmente en áreas como la escritura, el dibujo y las actividades que requieren habilidades gráficas, o hacer tareas que impliquen habilidades motoras finas.
  • Problemas de planificación y organización: Pueden tener dificultades para planificar y organizar secuencias de movimientos, como seguir instrucciones complejas o completar tareas en un orden específico.
  • Dificultades en el equilibrio y la postura: Pueden ser propensas a tropezarse, caerse con frecuencia o tener dificultades para mantener una postura levantada y establo.
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¿Cómo puedo saber si mi hijo o hija tiene trastorno de habilidades motoras?

Estos son algunos pasos que puedes seguir:

  • Observa los comportamientos y dificultades: Fez mención a los comportamientos y dificultades motoras que observas en tu hijo en comparación con otros niños de su edad. Ten en cuenta las dificultades en la coordinación, habilidades motoras finas y gruesas, equilibrio, planificación de movimientos, entre otros aspectos relacionados con la motricidad.
  • Consulta con profesionales de la salud: Solicita una cita con un terapeuta ocupacional o un médico especializado en desarrollo infantil. Estos profesionales tienen experiencia en la evaluación y diagnóstico de trastornos motores y podrán realizar pruebas y análisis específicos para determinar si tu hijo presenta un trastorno de habilidades motoras.
  • Evaluación y diagnóstico: Durante la evaluación, el terapeuta ocupacional o el médico realizará una serie de pruebas y observaciones para evaluar las habilidades motoras de tu hijo. Esto puede incluir actividades que evalúen la coordinación, equilibrio, destreza manual, planificación motora y otras áreas relevantes. También pueden recopilar información sobre el historial médico y el desarrollo de tu hijo.
  • Considera la opinión otros profesionales: En algunos casos, puede ser útil obtener la opinión otros profesionales, como psicólogos o educadores, para obtener una perspectiva más amplia sobre el desarrollo y el rendimiento de tu hijo en diferentes áreas.
  • Seguimiento y tratamiento: Si tu hijo recibe un diagnóstico de trastorno de habilidades motoras, los profesionales de la salud podrán recomendar un plan de tratamiento adecuado. Esto puede incluir terapia ocupacional, que se enfoca a mejorar las habilidades motoras y funcionales, así como a desarrollar estrategias compensatorias. También pueden proporcionar recomendaciones y estrategias para apoyar a tu hijo en el hogar y en entornos educativos.

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